¿Se te ocurre
algo más osado que pedirle a tu hijo que se quede quieto y pose para una foto? En el hipotético caso de que lo consiguieras seguro que el resultado no tendría
tanta fuerza como si le hubieras dejado moverse libremente y hubieras hecho
click en ese momento. Para conseguirlo debemos ponerle ganas, jugar
mucho y tener en cuenta unas poquitas cosas más de las que hablaremos en
este taller.
Verles saltar
charcos, emocionarse, descubrir o ir en bicicleta es una experiencia en sí
misma, pero ser capaz de guardar pedacitos de realidad en fotos de calidad
estética y divertirnos haciéndolo ya es ¡total!
Para quién: El taller de
fotografía para padres va dirigido a aficionados a la fotografía que quieren
mejorar su técnica y aprender trucos útiles para que sus fotos cotidianas sean
algo más. Conservar en fotos la esencia
de tantos ratitos con sus hijos ampliando o descubriendo aspectos de técnica
fotográfica y composición que harán que captar ese momento sea ameno y
sencillo.
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