Todos
podemos sentirnos fatigados en algún momento. Para mejorar sus síntomas la
alimentación y la dieta que sigamos puede sernos de gran ayuda. Te explicamos
qué alimentos son los más aconsejados.
Independientemente
de la edad que tengamos es totalmente normal y habitual que en alguna ocasión
nos sintamos decaídos, cansados o fatigados. Sus síntomas son más que
evidentes: nos sentimos faltos de energía, sin ganas a hacer nada, y cuando lo
hacemos el cansancio físico nos impide hacerlo con normalidad.
Sobre
las causas, en realidad son muchas las que pueden provocarnos estos síntomas
como los cambios estacionales, algunas enfermedades, anemia, fibromialgia,
hipotiroidismo, problemas de hígado o riñones o la gripe y los resfriados.
Pero
no son las únicas causas que pueden ocasionar la aparición de fatiga y cansancio.
También otros, por ejemplo: problemas coronarios, intolerancia alimentaria,
estados emocionales, estrés, las preocupaciones, el exceso de trabajo, falta de
algunas vitaminas, minerales o una mala alimentación.
Como
podemos comprobar las causas pueden ser muchas, y en caso de que el cansancio o
la fatiga se alargue más del tiempo que podamos considerar normal, debemos
acudir al médico para que nos haga una buena revisión y buscar la causa que
ocasiona estos síntomas.
Algunos
consejos, remedios naturales y cambios en nuestra alimentación pueden ayudarnos
a combatir la fatiga, así como a prevenirla.
Cómo
combatir la fatiga a través de la alimentación
Como
hemos dicho anteriormente la falta de algunas vitaminas, minerales y la
mala alimentación pueden predisponernos a sentirnos cansados, desganados y con
fatiga.
Por
eso es importante llevar a cabo una dieta sana y equilibrada y en la que
reforcemos la ingesta de los siguientes alimentos que nos ayudarán a ganar
energías y ganar la partida al cansancio y la fatiga.
Alimentos
ricos en hierro
El hierro es un
mineral que entre otras importantísimas funciones interviene en el adecuado
transporte de oxígeno, participa en la producción de distintas sustancias y compuestos
de la sangre, participa de manera activa en la síntesis de ADN y además es
fundamental en la producción y liberación de energía.
Esto
significa que el hierro es fundamental para contrarrestar la fatiga y
energizarnos, y por este motivo cuando sufrimos de anemia tendemos a sentirnos
cansados, fatigados y sin energía.
Entre los alimentos con mayor contenido
en hierro destacan especialmente los siguientes:
Pescados
azules, hígado, carnes rojas de forma moderada, lentejas, espinacas, berros,
coles, alcachofa, remolacha, sésamo, pistachos, nueces, avellana, almendras,
avena, orejones de melocotón.
Alimentos
ricos en ácido fólico
El ácido
fólico es esencial para la adecuada formación de glóbulos rojos y de
hematíes, lo que nos permite disfrutar de una sangre mucho más saludable y de
mayor calidad.
Precisamente
cuando sufrimos una carencia de ácido fólico la anemia suele ser uno de sus
síntomas más típicos, y con ella la debilidad, falta de apetito y también
irritabilidad.
Entre
los mejores alimentos con ácido fólico destacan las verduras de hojas verdes,
aguacate, huevo, pescado azul, marisco, hígado, nueces, avellanas, almendras,
cacahuetes, pipas de girasol, sésamo, naranja, mango, papayo, frutos rojos,
germen de trigo.
Alimentos
ricos en cobre
El cobre es
un micromineral imprescindible para nuestro organismo ya que ayuda al correcto
transporte del hierro, interviene igualmente en la formación de glóbulos rojos
y hemoglobina y también interviene en la asimilación de la vitamina C por parte
de nuestro organismo.
De
ahí que el consumo regular y diario de alimentos con alto contenido en cobre
nos ayudará a aliviar la fatiga y el cansancio, puesto que su carencia causa
anemia entre otros síntomas típicos.
Lo
encontramos en frutos secos como nueces, almendras, pasas, legumbres como,
judías, garbanzos, habas, guisantes, cereales integrales como la avena, el
arroz, el trigo, ciruelas pasas, dátiles, chocolate, aceite de oliva, marisco,
calamares,
Alimentos
ricos en vitamina C
Considerada
habitualmente como uno de los nutrientes esenciales fundamentales para el buen
funcionamiento de nuestro sistema inmunológico y por tanto nuestras defensas.
La vitamina
C es una vitamina esencial para la absorción intestinal del hierro que
obtenemos en alimentos de origen vegetal, además de tener un papel importante
en la síntesis de neurotransmisores.
La
encontramos en verduras de hojas verdes, pimiento rojo y verde, tomates,
zanahoria, calabaza, brécol, col, coliflor, col china, las frutas cítricas
como, naranjas, mandarinas, kiwis, limones, pomelo, guayabas, piña, ciruelas,
plátanos, frutos rojos, uvas, papaya, mango, lichis, brotes de alfalfa y
germinados de lenteja y de soja, diente de león.
Otros
consejos nutricionales contra la fatiga a tener en cuenta
Además
de completar nuestra alimentación diaria con algunos de los alimentos sobre los
que te hemos hablado en los apartados anteriores, también es aconsejable seguir
una serie de consejos nutritivos útiles.
Evita
las comidas rápidas, los alimentos procesados y los ricos en grasas saturadas.
Desayuna
siempre, no te saltes el desayuno, es la comida más importante del día, la que
nos aporta las primeras energías: Prepara desayuno con los siguientes cereales
como, los copos de avena, muesli, y acompáñalos con frutos secos como
avellanas, almendras.
Si
te sientes decaído a media mañana o media tarde recurre a un tentempié que
te aporte energías: puedes optar por estos alimentos, plátano, orejones,
dátiles, un puñado de nueces, barritas de cereales integrales, dos cuadraditos
de chocolate negro.
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